Brasil.- Cada año aumenta el número de jóvenes, en su mayoría afrobrasileños, ejecutados en favelas por el narcotráfico y por la policía. Esta situación es es vista como algo “natural” por parte de la opinión pública, señaló el estudio de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).
Nuestras políticas públicas en el plano estadual y federal se concentran en la protección de la población blanca, mientras la población negra es descuidada”, dijo el coordinador del informe, Julio Jacobo Waiselfisz.
El “Mapa de la Violencia” contra adolescentes se basó en datos oficiales según los cuales mientras sube de manera constante el número de muertos por asesinatos cae la estadística de los que fallecen por problemas de salud.
El grueso de las víctimas son chicos de entre 16 y 17 años y en vistas del cuadro social y económico actual no se puede esperar que el cuadro mejore, “las previsiones son realmente preocupantes”, señaló Jacobo Waiselfisz.
En 2013 se registraron 10.520 asesinatos lo que representa un aumento del 475 % frente a 1980 y el incremento es del 20% en la comparación con 2003. Río de Janeiro, donde se observa un rebrote de la guerra cotidiana en las favelas, es uno de las estados con altos índices de violencia con 19 muertos por cada 100 mil habitantes.
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