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El tiempo estratégico y la destrucción total del enemigo

Por Alfonso M. Becker
jueves 01 de marzo de 2018, 00:26h
“Las fronteras más violentas de este mundo son las que separan el Islam de sus vecinos que tienen otras religiones o ninguna” … Samuel P. Huntington
La narrativa geopolítica musulmana desde el llamado Resurgimiento no es otra cosa -a ojos de todos los eruditos- que un canto de sirena para la chusma fanatizada por criminales que se hacen llamar religiosos… La malévola intención de reescribir la Historia respecto a Jerusalem, o de todo el Oriente Medio, no tiene otra lectura que la continuidad propagandística de guerra de un Islam que ha caído en su propia trampa; tanto más cronológica cuanto más se acercó a las tesis de Joseph Goebbels, o tanto más apocalíptica cuanto más se aproxima a su aberrante interpretación panegírica de la Yihad… Un sistema religioso de odio a muerte contra los judíos que ya no engaña a nadie...

Ningún país se “traga” ya el intento musulmán de santas palabras con una retórica medieval de “resistencia” islamista que en modo alguno domina los “loci tópoi” del pensamiento clásico griego; y cuyas constantes temáticas y tópicos prefijados son totalmente calcados del corpus semántico del nacional-socialismo del Tercer Reich. El terrorismo musulmán ya no pasa desapercibido en ningún lugar del planeta; ya ha sido “detectado” en todo el mundo como un proselitismo de muerte y destrucción de las sociedades donde se asienta… Y lo que fue una cultura, un estilo de vida y una poderosa fuerza de unificación con el califato omeya del siglo VII, es hoy un canto al odio a la violencia y al exterminio de judíos y demás infieles.

Con la educación de culto a la muerte, la estrategia de infiltración en las sociedades cristianas para destruir a los “infieles” y otras majaderías de tarados intelectuales como implantar la Sharia y sustituir el derecho internacional, el moro nunca tendrá aceptación en Occidente porque -como dicen los budistas- provocan todo el asco milenario de su paso por este mundo; y con el odio y la incultura manifiesta en los musulmanes de hoy, es imposible que resurja nada parecido a un nuevo siglo VIII de califato abasí…

Y vean como ejemplo que cuando su “Yihad” genera algo parecido o semejante, siempre sobresale un “khalifa” como Abu Bakr al-Baghdadi dispuesto a destruir los hogares de los musulmanes de Irak, de Siria o de Persia, y de apropiarse de sus mujeres para hacerlas concubinas… Esto ha ocurrido y está ocurriendo… Es la Historia que muchos pasan por alto… El moro y el turco la ignoran siempre… El asesino turco, Erdogan, niega el genocidio armenio, cómo y por qué mataron a millones de armenios, y amenaza a quien habla de ello, sea funcionario de alto nivel de la ONU o del mismísimo Dios de Cielo...

En la escuela musulmana se les enseña a exigirlo todo para la nueva conquista en tierras de infieles… La especialidad preferida del mahometano es reescribir la historia, inventarlo todo y hacer un espectáculo criminal de ello… Los árabes de la Palestina británica lo entendieron perfectamente y para todos los musulmanes era la “historia perfecta” para conquistar Jerusalem, destruir el Estado judío y echar a los hebreos al mar... La guerra es su única pasión con tal de matar judíos y demás infieles… Berlín pensó lo mismo cuando dio el pistoletazo para conquistar Eurasia y exterminar a los judíos; y le salió el tiro por la culata…

Y estos asesinos -según Washington- enloquecidos mahometanos de hoy que forman la triada Teherán-Siria-Hezbollah, se hacen llamar Eje de Resistencia Islámica y su fuerza terrorista de choque es “el Partido de Allah”, grupo de terror señalado por el Pentágono como el “nido de ratas” a exterminar por cualquier medio en el Líbano… O donde sea… Este señalamiento semántico es normal cuando la CIA quiere ajustar cuentas por el asesinato de más de 500 funcionarios estadounidenses por los asesinos islámicos del Partido de Allah… Sin embargo, al otro lado del mundo, en la República de Myanmar, el campo semántico se pervierte a extremos de pánico y de miedo por la actuación no solo del terrorismo musulmán sino por el proselitismo violento de los mahometanos y el rapto de niñas budistas para casarlas con musulmanes… Hay de todo como en boticas...

El Gobierno birmano advierte al mundo sobre las ONG que ayudan al grupo terrorista musulmán Ejército de Salvación Rohingya de Arakan, asesinos que matan en nombre de Allah, los budistas llaman a esta gente “pandilla de piojosos de mala muerte, fanatizados por el Corám” y las terribles consecuencias de ese desprecio por los mahometanos descerebrados y su Yihad, están rayando la guerra de exterminio que los medios callan porque nada es lo que parece… “Donde hay moros hay odio, guerra y muerte” … Esta sentencia de los birmanos es comparable a Gaza y a todo el Oriente Medio…

Dice ayer el presidente persa, Hassan Rouhani, en la televisión iraní: “Los extranjeros nunca son bienvenidos en el Golfo Pérsico” … Inmediatamente, los partidos contrarios a la política migratoria europea saltaron a coro… “A la Unión Europea han llegado millones de musulmanes incultos, sucios y peligrosos, gente extraña, extranjera, con ideas criminales y costumbres medievales y absurdas… Tampoco son bienvenidos” … “Y sin embargo aquí están” … Ahora solo falta que salga por la CNN, Donald Trump, y le diga a don Hassan Rouhani: “¿Lo entiendes, moro de mierda, de un país de mierda?”

Los musulmanes no quieren saber nada de la Historia… Allá ellos… y están condenados a repetirla -parece ser- en estos tiempos de guerra, según lectura mahometana, hasta que desaparezcan de la faz de la tierra; porque el moro carece de ilustración y solo es carne de cañón preparada para la muerte por sus fanáticos clérigos que, desde hace 500 años han sido definidos en la Europa judeocristiana como “clerigalla de parásitos” que pregonan la Yihad...

El tribalismo como estructura de lealtad entre los árabes está en plena caída por el tobogán de la historia (que se lo pregunten a los poderosos saudíes); la plena decadencia mahometana y su fanática y absurda idea de imperialismo musulmán ha llevado a todos los musulmanes del planeta a situarse al borde de un precipicio -empero de arenas movedizas- esos abismos que no tienen salida, ese infierno que los devora poco a poco; en el que difícilmente podrán pasar de ser grupo pequeño hacia la soñada gran fe; cambiar de su existencia como tribu a la “imperial” ummah; fantasía geopolítica que sus clérigos y ulemas han metido en sus pobres cerebros embrutecidos; cabezas atiborradas de letanía barata como Machtergreifung para la toma del poder en sus teocracias.

En el mundo musulmán, según el profesor de Ciencias Políticas, Samuel P. Huntington, la similitud con el Reichsministerium für Volksaufklärung und Propaganda de la Alemania nazi, va mucho más allá de lo que soñaba el perverso criminal, Muhammad Amin al-Husayni, acérrimo antisemita, antiguo muftí de Jerusalem, aliado y amigo personal de Adolf Hitler… Sus herederos como Yaser Arafat o el actual viejo terrorista Mahmoud Abbas, no solo le ganan en la demagogia desplegada sino -además- en el patético intento de desplegar su espectáculo de victimismo propagandístico con asesinos especializados de la Franja de Gaza… Ya nadie olvidará nunca “Palywood” … En Estados Unidos lo saben… El moro ya no engaña a nadie. Es asesino desde la cuna hasta la muerte...

Así pues, para la cultura judeocristiana, a día de hoy, el resultado inherente de una guerra contra los asesinos del Islam no es, ni puede ser otro que un aplastamiento total de vidas y máquinas del aparato mahometano de poder… En la Sociedad del Espectáculo militar hay todo un abanico de posibilidades para que el “Palywood” mahometano se pudra en su propia basura yihadista. No les quepa duda: se pudrirán por generaciones. Como muy bien expusieron los sabios de Instituto John M. Olin de Estudios Estratégicos de la Harvard University, el asesino terrorista no negocia, no le interesa negocio alguno en el que no estén recogidas todas sus exigencias…

El moro lo quiere todo o nada… Esa es su amenaza… Así son los turcos, así son los persas y así son los árabes como civilización y así comienzan a mostrarse el Frente Moro de Filipinas y los musulmanes de toda la Indonesia y de todo el planeta... Civilización musulmana, por supuesto… En ese tesoro arqueológico de incalculable valor que es “The clash of civilizations and the remaking of world order”, el difunto profesor y politólogo del Eaton College, advertía gravemente por el gran “terremoto” que se avecinaba: el viejo truco de la “guerra fría” no funcionará con los asesinos mahometanos. No son tan tontos…

Samuel P. Huntington lo declaraba en sus conferencias: “Llegará violentamente el choque de civilizaciones y tanto Rusia como Estados Unidos deberán tener muy claro de qué parte están porque si hoy son los musulmanes los que quieren exterminar a los infieles, mañana serán los chinos” … Historiadores, sociólogos, antropólogos, filósofos y -sobre todo- los modernos politólogos, todos de cierto renombre, advierten que será mucho peor de lo que anunciaba Samuel Phillips Huntington en su libro. Será mucho peor porque el odio acumulado por los musulmanes contra los judíos los delata como asesinos peligrosos...

¿Qué solución hay? Ya la sabe todo el mundo. Se suele decir ninguna... Porque nadie quiere hablar de ello… “La guerra es la guerra y cuando la pides tienes que afrontarla”. Es lo que dicen los más pacifistas: los budistas… Luego no vale decir: “Es que el imperio es muy malo” como un gallina del Islam… Por tanto, Occidente sabe que al terrorista hay que matarlo como se mata al enemigo; y a sus descendientes -dice el budista de Myanmar- hay que hacerles ver que perderán sus riquezas, sus propiedades y todo su futuro; porque sus países serán totalmente destruidos… De qué diablos estamos hablando mahometano…

¿De dónde sale toda esta idea? Pues… desde la China milenaria hasta nuestros días. En textos de renombre universal, perfectamente escritos en todos los idiomas… ¡Es la guerra, moro! -te dice Occidente como se le dijo a Muamar el Khadaffi- ya no contarás más milongas sobre destruir Israel o niñitas rubias que atacan a patadas a soldados para los noticieros de propagandistas musulmanes… El planeta entero ha comprobado que en el plano local las líneas divisorias más violentas de este mundo son las de los musulmanes con sus vecinos… Son las fronteras que separan al islam de sus vecinos ortodoxos, budistas, cristianos de Occidente, judíos, hinduistas, africanos y para colmo de ¡hasta los que no son creyentes! ...

Aunque los entendidos en las tácticas y estrategias modernas para la guerra mantienen distintas opiniones según sus culturas y su forma de entender la existencia humana. En Oriente Medio se puede observar, estudiar y comprender que los musulmanes de este siglo XXI, bajo el influjo de su llamado “Resurgimiento” no han entendido nada… No han hecho una lectura correcta ni siquiera de los últimos 25 años donde podían haber comprendido qué es lo que realmente ocurre cuando quieres exterminar, judíos, infieles de todos los países y colores, o colocar la bandera del Islam en la Casa Blanca...

¡Entérate musulmán!” -gritan hoy en Arizona los aborígenes norteamericanos en lengua atapasca- Thunderbird es el espíritu ancestral de una república estadounidense que está siendo atacada por todos los frentes… Está en apuros, es cierto. Sus enemigos se han compinchado y entre todos pretenden destruirla. La peor ralea de asesinos de este mundo se está rearmando hasta los dientes con los más destructivos cohetes y las más devastadoras bombas nucleares… La Unión Europea no parece reaccionar como no lo hizo en las dos anteriores guerras globales…

¡Entérate, moro, turco o persa! Los navajos y todos los apaches chiricahuas saben que los soldados del Pentágono son ahora descendientes de skinwalker y que se convierten en cualquier cosa, cualquier monstruo que te atacará y te matará… No es una metáfora. Muy pronto lo van a comprobar. Thunderbird lleva bajo sus alas las serpientes de fuego que tanto ansían tener para matar judíos… Pues eso es lo que recibirán… Fuego y furia, eso que se le escapó de los labios al “dicharachero” Donald Trump…

Eso es lo que quiere el mensajero del Gran Espíritu… Thunderbird descansa en su nido, en la parte superior del árbol de la vida…

El pájaro del trueno vive en Washington, en Capitol Hill, y no es conveniente despertarlo. Utiliza un tiempo estratégico poco conocido por sus enemigos. Sabe esperar el momento adecuado para sembrar su venganza...






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