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El taekwondo exige mucho para las clasificaciones de los Juegos Centroamericanos y del Caribe

Por Redacción Diario Hispaniola
sábado 17 de febrero de 2018, 17:15h

Ese espectáculo con obras de todos los géneros está teñidos de drama: los chiquitos tendrán que pegarle a los grandes para llegar a Colombia, los de Poomsae deberán ser tan pulcros y estrictos como si del mundial se tratara y los de Freestyla deben sellar el pase para dejarse una medalla.

Santo Domingo.- Clasificarse a los Juegos Centroamericanos y del Caribe es tan complejo que colarse a las instancias finales será toda una odisea para los competidores de los 33 países participantes de las federaciones adscritas a la World Taekwondo Panamerica (PATU).

Por cada peso hay disponibles siete cupos para hombres en Kyorugy, seis para mujeres en femenino en la misma modalidad; 12 para Poomsae Indivudial, cuatro para competición de Freestyle por equipos, y tres para equipos de Poomsae.

Ese espectáculo con obras de todos los géneros está teñidos de drama: los chiquitos tendrán que pegarle a los grandes para llegar a Colombia, los de Poomsae deberán ser tan pulcros y estrictos como si del mundial se tratara y los de Freestyla deben sellar el pase para dejarse una medalla, nada más.

La eliminatoria de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, será en marzo próximo en Monterrey, México; y la prueba se perfila como una de las más difíciles de superar por la gran cantidad de atletas que se esperan, a pesar que por el momento la Federación Mexicana de Taekwondo no revela un número preliminar. Lo cierto del caso es que al final del evento solo habrá poco más de 120 atletas con tiquete para Barranquilla, Colombia.

El pasado 12 de febrero, el presidente de PATU, Ji Ho Choi, vía correo electrónico emitió un recordatorio a los presidentes de las federaciones nacionales diciéndoles que para la eliminatoria todos los países de la región deben participar.

Pero las escenas de la gran obra de filtración serán así: a pesar de la laboriosa competeción para la etapa final del evento, hay competidores que ya llegarán con una medalla ganada; los atletas de combate de países emergentes tienen altas posibilidades de toparse a un rival de una potencia en las dos primeras peleas, lo que se convierte en una faena muy difícil porque la eliminación es simple; en Poomsae Invidual el acto es el más misterioso: no hay favoritos más allá y todo se descubrirá hasta el momento.

En el primer acto, por ejemplo: todos los competidores de Poomsae Freestyle por equipos que lleguen a Barranquila tendrán medalla, ya que en Monterrey se clasifican dos equipos masculinos y dos femeninos, más el conjunto de Colombia (que tiene pase libre por ser anfitrión), la sumatoria de esos tres conjuntos es el resultado de que el Taekwondo premia al primero, segundo y terceros puestos, con oro, plata y bronces, respectivamente.

La información consta en el Manual Técnico de la eliminatoria que la Federación Mexicana de Taekwondo puso a disposición en su sitio web, así como en el mismo libro de la organización de Barranquilla 2018.

Los entrenadores y directores de selecciones nacionales participantes ven con diferentes perspectivas las posibilidad y cada uno acomoda e intenta reescribir el guión para poder dar el mejor espectáculo y lograr actuar en Suramérica a mediados de julio.

Federico Rosal, entrenador de la selección nacional de Guatemala, analizó detalladamente el segundo acto y refuerza con sus explicaciones que debe leer con detención todo el guión del evento para descifrar verso a verso lo que dicta el torneo eliminatorio y espera poder jugar con sus mejores actores en la justa final de Colombia.

“Al contar con Mexico (sede del clasificatorio), Venezuela, Rep. Dominicana, Puerto Rico y Cuba con atletas de talla mundial, más la reducción de plazas a clasificar (por la inclusión de Poomsae con sus distintas ramas), será complicado (clasificarse); ya que tomando en cuenta los países mencionados suman cinco; y eso con las plazas de femenino (en combate) que son únicamente seis, las de masculino siete, eso nos lleva, en teoría, a hablar de la alta probabilidad de ganarle a uno de esas potencias para clasificar porque según sabemos será eliminación sencilla (sin repechaje)”, explicó Rosal.

En efecto, el nivel de esta obra llamada eliminatoria es sumamente alto si se parte del hecho que cuatro países tienen registros de medallas olímpicas y seis con preseas mundiales.

México, Cuba, Venezuela y República Dominicana son los países que tienen medallas olímpicas en sus registros. Los aztecas suman siete, los cubanos cinco, los dominicanos y venezolanos dos, cada nación.

Con los metales mundiales los datos aumentan un poco más: México (64), Cuba (14), Venezuela (5), República Dominicana(5), Guatemala (2) y Costa Rica (1), son las naciones con medallas de estos eventos.

La reducción de cupos, sin duda alguna, es el tema que más atención atrae para los entrenadores. Incluso para uno del calibre del español Juan Antonio Ramos.

El ibérico acompañará a la -57kg panameña Carolena Cartens, y su manifestación se basó en la diferencia de plazas y lo que ese insignificante número de por medio va a cambiar las instancias de Barranquilla.

“La ultima vez eran ocho plazas, ahora seis para chicas. Para mí poco, pero parece que son las nuevas normas y hay que atacarlas. Luego las que clasifiquen y vayan a los Juegos Centroamericanos y del Caribe ya saben que aún siendo G1 el oro no podrá obtener los diez puntos porque no habrá ocho atletas siendo un campeonato tan importante”, dijo Ramos.

Fuente: COLIMDO/ MÁS TKD

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