Estados Unidos necesita dar un golpe de efecto…

Estados Unidos ha llegado a lo que se llama “un callejón sin salida” en la sociedad de las representaciones geopolíticas, en un mundo en el que se escenifica el gran espectáculo de la diplomacia... Al que guste y disfrute de la filosofía política entenderá rápidamente que utilizar el símil de callejón describiendo en la narrativa ese corredor o viaducto que carece de desembocadura en otra calle, no debe entenderse como una situación peligrosa con la que se tiene que lidiar por haberte metido donde no debes… Tampoco se trata de un asunto, negocio o disputa de difícil tratamiento, y no debe confundirse en filosofía con un conflicto de pocas posibilidades de arreglo o problema de imposible resolución…

En la sociedad espectacular, la alienación del espectador que contempla la guerra o lee sobre ella es un hecho consumado, producto de su propia actividad inconsciente. Solo tiene usted que leer a los pobres ignorantes que opinan con sus correos a los periódicos… La definición científico-social no es otra que: cuanto más contempla o lee sobre la guerra, en tal o cual sitio, menos ve y menos la comprende… Llegando al extremo de la indignidad porque como bien se decía en el Mayo del 68 francés, el idiota ignorante y el estúpido inepto, aceptan reconocerse como protagonistas geopolíticos en las imágenes dominantes de la pobreza (en todos los sentidos) y necesidad en la que vive, realmente, como un esclavo que aparenta no tener cadenas...

Si quiere usted un ejemplo práctico, solo tiene que recordar cómo los pobres y desheredados de México, viviendo en el país más corrupto del planeta, una nación mexicana repleta de fosas comunes con cientos de miles de ejecutados y desaparecidos, con el mayor número de mujeres asesinadas del mundo, de mujeres “vivas”, violadas o que ejercen la prostitución bajo la más grande red de proxenetas; tráfico de esclavas sexuales desde el Caribe hacia países musulmanes, sanguinarios cárteles de la droga infiltrados hasta lo más alto del Gobierno… y paramos cuando usted diga… Pues bien la chusma mexicana, el rebaño social manipulado por sus corruptos gobernantes y sus putas de los mass-media, señalan a Donald Trump como la fuente de todos sus problemas...

Dígame usted qué se puede esperar de la gente común que no sabe de lo que habla, que se ha olvidado por completo de que, a los verdaderos periodistas, en México, los acribillan a balazos y que la media docena que quedan vivos, escriben desde Madrid y protegidos por la policía española… ¡Abajo Donald Trump! ¡No a los muros! ¡Vivan los puentes! ¡Soy un puto ignorante! ¡Me gusta mucho ir a las manifestaciones! ¡Porque me gusta cambiar el planeta recalentado!

Cabra descarriada que no entiende nada de lo que está pasando… mucho menos comprende su propia existencia y sus propios y decadentes deseos… y se rige, única y exclusivamente, por los “creadores” de opinión que apacientan el rebaño. Ni siquiera saben que los pastores que los manipulan, utilizan a sus más frívolas y promiscuas actrices y a los cantantes de moda más aberrantes… La perversión del espectáculo político consiste en que una zorra de la peor calaña y un “colgao” hasta el cuello de cocaína, son los que te dicen a quién tienes que odiar y a los políticos mexicanos que tienes que amar...

Como he explicado muchas veces, la guerra es un espectáculo más, de cierta relevancia por sus fuegos de artificio y porque hay mucha destrucción, sangre derramada a raudales y muchos cadáveres… pero no se debería olvidar que cualquier explicación ética o consideración moral es contemplada como una zarandaja con menos valor explicativo que un llamado “daño colateral” o cualquier otra palabreja del arsenal de eufemismos posmodernos; porque la guerra, por mucho que dure, siempre es la parte final de una negociación en la que nunca hubo acuerdo ni con los chinos, ni con los moros, ni con la madre que los parió… Cómo le explicas a un pobre ignorante que la guerra no ha parado nunca y nadie la puede interrumpir en una sociedad que es inmoral de nacimiento…

A estos sujetos que opinan a gritos sus sandeces “intelectuales” inoculadas por el espectáculo geopolítico se les llaman “activistas” para que se sientan importantes… para que crean que son protagonistas de la Historia con mayúsculas. Lo curioso de todo esto es que, el tarado cerebral posmoderno, en su grado de afección patológica, no sabe que ni siquiera alcanzan la condición de extra en la producción de ese espectáculo estatal. Algo realmente patético… Externalizar mediante el fervor ideológico de las masas es el gran éxito de la casta política dominante. La exterioridad del espectáculo en relación con el hombre activo al que, desde ahora, llamaremos activista…

Algo que se manifiesta en el hecho de que unas chusmas de tarugos intelectuales se apropien de tus palabras martilleantes y de tus gestos catatónicos… repetir hasta la saciedad “muros feos”, “puentes bonitos”, “Donald malo” y “Kate del Castillo guapa” … El triunfo del aparato de propaganda en manos del PRI por haber conseguido que tu insoportable letanía política sea recitada por otros… Que otros muertos de hambre representen el espectáculo por las calles mientras la mafia se folla a Kate del Castillo en una piscina de champagne… La ciencia política no tiene fronteras, carece de límites fronterizos.

Y, a mi juicio, a la casta política le sobra poca vergüenza para dictar consideraciones morales en el prostíbulo en el que se desenvuelve. Ahora mis lectores saben que solo la Filosofía Política puede explicar que la razón por la que un simple y vulgar espectador, encadenado al espectáculo ofrecido por la casta dominante, nunca encuentra un hogar donde refugiarse y desconectar el espectáculo, es que el espectáculo está en todas partes… Incluso el sueño y las pesadillas, en su cama, forman parte de él.

La guerra de Siria, el genocida Bashar Al-Assad, los asesinos mahometanos libaneses del Partido de Allah y los sanguinarios ayatolas persas que ponen el dinero para destruir América, forman parte de la gran representación regional en Oriente Medio… Todos se han confabulado contra Washington porque muestra evidentes signos de debilidad… Así lo dice la legendaria ex Secretaria de Estado U.S.A. Condoleezza Rice cuando ve que no solo acorralan a los Estados Unidos los asesinos del Islam… La temperatura de la guerra sube y sube, también en los mares de China; y Xi Jinping ha dicho abiertamente que el loco de Donald Trump no le da miedo y que los marinos estadounidenses serán, muy pronto, expulsados de Asia-Pacífico…

Los chinos son muy poderosos militarmente y se mofan de Donald Trump porque para loco de verdad, los chinos tienen al norcoreano Kim Jong un… y si quieren comenzar una pelea de perros, Beijing está de acuerdo en que comience… Una amenaza como esa nunca le ha hecho a los Estados Unidos. La profesora de la Universidad de Stanford asegura que Washington no da signos de credibilidad, la gente no le teme a los americanos, le han perdido el respeto. Está segura de que Donald Trump ha llegado para algo… Y tendrá que ser algo gordo porque tienen “rodeado” al Séptimo de Caballería” … Lo que quiere decir Condoleezza Rice es que, si no tienes credibilidad acabando con Assad en Siria y con los ayatolas en Teherán, difícilmente te respetarán en los mares de China… Es necesario pasar al siguiente capítulo del espectáculo…

Es el capítulo en el que hay que enseñar los dientes, ser resolutivos al coste que sea, para que China sepa que se le “invitó” primero y que ahora la resolución será obra de Washington, por su cuenta, y de sus aliados… Lo que significará que Beijing ya no será considerado un “amigo” ni siquiera en el comercio...

El verdadero problema de Washington, y su máximo secreto, es si Vladímir Putin está preparado para lo peor… La información de inteligencia que manejamos es que Moscú colaborará contra el loco de Pyongyang, como lo está haciendo en Siria contra los asesinos mahometanos… Pero si China comienza un ataque contra los barcos estadounidenses son palabras mayores.

Dar un golpe de efecto es algo que está obligado a representar el Pentágono ante los enemigos y ante sus aliados... La credibilidad es el arma principal antes de comenzar una pelea.

Desde Capitol Hill ya le están indicando a Xi Jinping que hasta dónde quieren llegar es asunto de los chinos porque Washington está obligado a resolver el problema de seguridad nacional que sus enemigos le están ocasionando.

Si a los chinos se les va la mano, Estados Unidos utilizará todo el hardware militar disponible porque tendría que bregar con dos guerras, en dos escenarios muy complejos… El pueblo estadounidense intuye que la pelea de perros en Siria y con Teherán, puede ser aprovechada por China para golpear duro a los Estados Unidos.

Hay quien dice en el Departamento de Defensa que la “credibilidad” hay que demostrarla ahora y cuanto antes… Y que Dios reparta suerte cuando llegue el momento.

Porque se trata de una sola guerra global contra la hegemonía estadounidense.